martes, 29 de abril de 2008

Subasta de corazones

Había una vez una subasta de corazones. De todos tamaños y colores. Unos delicados, más baratos, habían sufrido varios infartos. Otros con ambiciones, regalaban tardes románticas para los dos.
Corazones rotos, con descuento. Ellos habían sido lastimados por una circunstancia de la vida, buscaban a quien los quisiera así y les ayudara a sanar sus heridas del pasado.

Pero todos querían que alguien los llevara. Algunos parecían fríos, secos. Otros parecían necesitados.

Corazones poéticos, interesados en conquistar a otros que fuesen precisamente opuestos a ellos y sentir que son héroes.

Otros corazones débiles, con sólo el instinto de latir. Pero indudablemente el deseo más grande de ellos era encontrar otro que pudiera entender su lenguaje.

Querían sentirse orgullosos cuando un hombre le dijera a una mujer: te amo con todo mi corazón.

Querían sentirse útiles cuando una mujer le dijera a su mejor amiga: siento en mi corazón que verdaderamente él me ama.

Había también un pobre corazón, un loco corazón, un tonto corazón y un tierno corazón.

El pobre corazón, no había sido correspondido y le habían robado los mejores años de su vida, hoy estaba en soledad, vacío y sin sentido.

El loco corazón, amaba y latía sin razón, se emocionaba, daba todo de sí, saltaba de alegría al ver llegar una nueva ilusión.

El tonto corazón se reprimía cuando debía abrirse y sacar lo mejor de sí. En vez de ilusionarse, huía cuando tenía a alguien que debía amar. En vez de acercarse, se alejaba. Era de esos que huyen del amor de su vida y cuando recapacitan e intentan ir tras él, ya es demasiado tarde porque es imposible.

El tierno corazón era grande, imponente, cariñoso. Provocaba ternura porque seguía siendo iluso, no entendía que la vida, especialmente en asuntos del corazón, no es fácil.

La subasta estaba por cerrarse cuando alguien se acercó y decidió comprarlos todos. Decidió darle una nueva oportunidad a los que habían amado sin ser correspondidos, a los que se habían equivocado y no habían amado cuando debieron hacerlo, decidió restituir otra vez a los corazones locos, a los tontos, a los tiernos.
En fin, tomó la decisión de comprar todos los corazones, inyectarles nuevamente pasión, amor y fe.

Al final, nadie entendió por qué había hecho el sacrificio de comprarlos a todos. Y es que para comprar corazones debía hacerlo con sangre. El único que pudo hacerlo dio toda su sangre y los compró a todos, les dio una nueva oportunidad para amar, para dar antes de recibir. Los corazones se abrieron y le recibieron, porque habían encontrado a su salvador, los sacó de donde estaban y les dio, otra vez, un nuevo sentido, una oportunidad.

Te amo. Amo tu corazón. No quiero que se entristezca y prometo cuidarlo.
Toda mi vida cambió, y...no sé si a tí te pase lo mismo.
Siento que pierdo la razón, y...no sé si a tí te pase lo mismo.
Te extraño cuando recién te has marchado, y...no sé si a tí te pase lo mismo.
Me gusta cada gesto que haces, y..., no sé si a tí te pase lo mismo.
Desde ayer, no te he podido olvidar, y..., no sé si a tí te pase lo mismo.
A veces, me duele amarte, y..., no sé si a tí te pase lo mismo.
Siento que te amo y me da nervios, y..., no sé si a tí te pase lo mismo.
Tengo angustia por tí, y..., no sé si a tí te pase lo mismo.
Quiero vivir contigo el resto de mi vida, y...no sé si tú piensas igual.

lunes, 28 de abril de 2008

De cuando se enamoran de tí (parte uno, una canción)

Una de esas canciones "para mujeres".
No llames la atención ni sigas provocándome, que ya voy comprendiendo cada movimiento. Me gusta lo que haces para conquistarme, para seducirme, para enamorarme, ya va causando efecto...
No sabes cómo me entretienen todas tus locuras y que para verte invento mil excusas, has dejado en jaque todos mis sentidos. Pones a prueba el motor que genera los latidos...
Ahora lo importante es entender qué pasa cuando alguien se enamora de tí. Es un privilegio, un lujo y un honor. Los tontos y las tontas dicen que "no quieren crear falsas ilusiones" en la otra persona. Quién se creen que son.
¿Alguna vez te has visto en un espejo?, ¿alguien te necesita a caso?, ¿qué tienes para dar?, ¿por qué alguien no podría vivir sin tí?, jajaja.
La gente que es presumida, cree que porque alguien le dijo que era bonita o bonito, lo es para todos.
La gente cree que todos piensan que es agradable, y no es cierto.
Cuando se enamoran de tí y no vas a corresponder, debes tener madurez para proteger los sentimientos de la otra persona. Pero ¿cómo no amar a alguien que te ama íntegramente?
Al tiempo, todo pasa y todo queda.
Esta es la primera parte. Ya leerás qué pasa cuando alguien se enamora de tí.

Amor

Hoy voy a hablar del amor. Dedicaré unas líneas, unas ideas a él.

Cuando encuentras a la otra persona, a tu otra parte sabes que no hay alguien más, viene la certeza. Recuerdas los momentos que le extrañaste aún sin conocerle. Le pides a Dios que se quede siempre y que te dé la oportunidad de amarle.

Piensas en las cosas que harías para demostrarle tu amor, en las cosas que serías capaz para estar junto a él o ella, todo lo que haces quieres que lo vea. Recuerdas otra vez el pasado triste y alimentas tu felicidad, lo único que quieres es que nunca se vaya. Amas con toda tu alma.

Pides perdón, quieres estar bien con Dios, tu espíritu necesita concentrarse en algo bueno, porque algo bueno ha llegado a tu vida.

Tomar su mano...es sentir seguridad pensando que haces sentir segura a la otra persona. Supones los extremos que tu amor te hará hacer.

Te gusta que ella o él confíe en tí. Amas cuando sonríe queriendo decir: te amo.

Déjate amar...sé qué dicen tus ojos con sólo mirar.
Piensas que las distancias no existen. Todo se hace cerca, o al menos no te importa la lejanía. Sabes que sin decir palabras, se expresan muchas cosas. Guardar silencio es decir mucho, es platicar, significa un lenguaje de corazones.
¿Qué será que siempre hablo de estas cosas?, no sé. Talvez porque hay personas que se dedicaron a leer y me hacen creer que es importante lo que hago.
Siempre que se separan te queda un extraño sabor a agridulce. Dulce porque acabas de estar con esa persona, pero agrio porque se va. Entristeces cuando la ves irse. Y no te queda más que subir la cabeza, pedirle a Dios por su seguridad, amarla en silencio, recordar las gracias que dijo ese día, las cosas que te hicieron reír. Pones atención al beso que no esperaba pero que correspondió.
Sé que no hay nadie más.
Con honestidad.
Quédate aquí, siempre.
Te quiero amar.
Recuerdo que empecé escribiendo en una hoja de papel de un viejo cuaderno mientras tenía espacio entre clases. Me escondía en un rincón y anotaba sentimientos y pensamientos románticos para alguien en especial. Ella provocó lo mejor de mí, sacó esto y aunque no sé dónde está, es importante agradecerle.

viernes, 25 de abril de 2008

De los fines y los comienzos

Llega un momento donde sabemos que es hora de tomar rumbos distintos, y duele. Sabes que todo terminó. Ya no hay nada más que hacer. Ahora, sólo recuerdos. Los sueños que eran para él o para ella, se pierden.
La lluvia hablará de tí. Los libros hablarán de tí. Las nubes hablarán de tí. La ausencia hablará de tí. Los sueños hablarán de tí. Y yo, jaja, hablaré de tí, con todos, contaré lo que soñé, lo que quise y no pude, lo que pensé que sucedería y no sucedió finalmente.
Y eso se llama dolor.
Habrá insonmio. Pero por otro lado la oportunidad de conocer gente nueva, expectativas distintas, cuando sientas estarás soñando otra vez, deseando otra vez.
Me falta tu amor. Y ya. Eso es todo. Ni siquiera tengo una excusa sana y razonable. Me sentiré mal conmigo mismo cuando te vea y procure no hablarte para no dañarme excusándome con la idea de no dañarte a tí.
Tú preguntarás un día por qué han cambiado las cosas, yo diré que no es así y no insistirás más. Y eso me dolerá. Estarás feliz. De repente tendré el impulso de hablarte como antes y todo estará bien, disfrutaré por momentos eso, pero sé que ya no es real, que desapareció.
Me haces falta. El mazoquismo de las canciones tristes aparecerá.
La soledad perderá la vergüenza y te atacará sin piedad. Jugarás juegos para saber si te ama, jaja, pero YA TODO TERMINÓ y bien lo sabes.
Los proyectos que eran para los dos, hay que detenerlos porque resulta absurdo.
Déjame sentir que todavía estás. Ojalá que no te me aparezcas, quiero recordarte estando junto a mí y no verte con alguien más, y lo peor: entender que eso te hace feliz, porque entonces ya no tendré excusa ni retorno.
No digas mi nombre. Quiero despertar en paz. Entiendo que lo que te dí te parece que no era tan bonito ni espectacular. Todo lo que fuimos, a estas alturas ya no vale.
Adiós.
Los fines, son también comienzos.
Los comienzos son oportunidades.
Los comienzos son retos.
Los comienzos no son tan fáciles, requieren esfuerzo.
Los fines duelen.
El final, es sólo el principio, para nuestra salud, de algo mejor.

De esas cosas

¿Existen los amigos de verdad?, talvez tú eres una excelente amiga o amigo. Pero, ¿hay alguien que corresponda esa amistad?, hablo de la intensidad. Todos dicen que los amigos fallan o pueden hacerlo, con eso hipotecamos el futuro de las relaciones. Creo que somos seres independientes, que creemos necesitar a alguien más porque efectivamente requerimos servicios, vivir en comunidad, convivir, pero al fin y al cabo no respiras con los pulmones de otro. Hay tristezas, soledades, cosas raras.
Es cierto, Dios está siempre allí. Pero sólo quien ha experimentado soledad sabe que hay momentos que nos encontramos solos, porque Él decide que aprendamos algo de eso y es esto lo que no entendemos
La gente está y se va.
Vienen otros que estarán un tiempo y se irán.
Habrán algunos, escasos, que permanecerán, sin intensidad como tu familia claro, y quienes se hagan parte de ella.
Cuándo fue que se fue tu amor, cómo fue que se fue sin mí. Ricardo Arjona.

Día 4.

Mis sospechas han sido confirmadas.
Hoy es el cumpleaños de la chica. En realidad no lo sabía. Aunque ayer empecé a sospechar. Hoy vino vestida diferente y escuché bulla en el pasillo cuando entró.
¿Le tengo qué decir algo especial?, supongo que no.
Como ya sé que después de mi hora de almuerzo ella va a cubrir a la recepcionista me acerqué a tiempo que lo hizo la otra compañera nueva, ella le preguntó si hoy era su cummpleaños y la chica afirmó. Le pregunté tontamente "hoy es tu cumpleaños" y respondió radiante, muy feliz con un "si".Le dije con clase, varonilmente "feliz cumpleaños". Agradeció.

No supe qué más decirle así que me fui. Iba a medio camino pero decidí regresar decidido a preguntarle si nos conocíamos de antes (no trataba de alguna excusa sin sentido para hablarle, si no que me había familiar no sé por qué), me dijo que no. Insistí en el asunto, noté que no había naturalidad en mis palabras, de hecho hablaba en voz baja y me dijo "yo que me recuerde no nos conocemos". Hice una broma al respecto y sentí que la conversación no fue tan natural como esperaba. Ahora sé por dónde vive, muy lejos de mí.
Y por cierto, después de todo no es tan bonita. Aunque me agrada que es femenina, a pesar de trabajar en medio de dos hombres.
Creo, por cierto, que ya descubrió, como suelen hacerlo casi todas las mujeres que me han rodeado, que no soy nada extraordinario ni espectacular. No hizo nada por hablarme y vaya si no entiendo esas cosas. Tampoco es una crisis ni nada parecido.
Sí, está confirmado, lo que me gusta es su feminidad. No sé por qué.
La chica de la oficina de al lado se fue a almorzar. Minutos antes noté que la de la risa bonita estaba conversando con ella no sé de qué. Estaba trabajando en mi informe cuando noté que se dirigía a donde yo estoy (deduje eso porque la otra persona estaba almorzando) y me dijo que si podía llevarse un banquito que está en mi cubículo. Hice una broma al respecto, lo normal y me dijo "aaaay..." con tono de mujer sutilmente agredida. Le gustó y no es suposición mía.
Recibí la llamada de una mujer que amo con toda mi alma.
He notado que quien trabaja en la oficina vecina, escoge ciertos momentos del día para cantar o tararear canciones, no le da pena ni vergüenza y eso me agrada. Ella, como he dicho desde el principio, es alguien muy agradable.
Dentro de una hora, otra vez, regreso a casa para prepararme ya que mañana es sábado y tengo que ir a la universidad.
La llamada que recibí cambia el ambiente. Pienso muchas cosas, sobre todo del futuro, cercano y eterno. Imagino qué pasaría si tal o cual cosa sucediera; entiendo que es total responsabilidad mía, y creo que eso me asusta un poco. Me gusta ganar, pero me da pavor perder.

Otra historia

Me va a extrañar, en sus paseos por el jardín, cuando la tarde llegue a su fin. Eso dice una popular canción.
¿Qué pasa cuando alguien nos extraña?
Es difícil entender muchas cosas de la personalidad. Me he internado a leer sobre psicología y el psicoanálisis, como parte de mis estudios en la carrera de comunicación en la uniersdidad. He entendido algunas y sonreído por otras que anteriormente las practicaba sin saber precisamente la teoría.
Yo soy verdaderamente complicado en el aspecto emotivo, soy difícil para las emociones y relaciones, no sé por qué. He tratado de entenderme y explicarme a mí mismo, he tratado de saber por qué actúo de tal o cual forma. He notado también que a las personas que tengo cerca, termino tratándolas de forma inadecuada, queriendo hacerles bien. Es un error mío, naturalmente.
Y no sé a cuántos les pase. No entender lo que escuchan. No saber lo que piensan. Y tener dificultades para vivir por eso. Yo casi nunca sé lo que pienso, hasta que lo escribo.

jueves, 24 de abril de 2008

Tres.

Hoy llegué otra vez muy temprano. Aunque me tocó venirme parado en el bus, decidí no esperar otro porque no quería correr el riesgo. En realidad, no ha habido tráfico los últimos dos días, no sé por qué.Creo que estoy haciendo un trabajo aceptable. La chica que está en la oficina de a mi lado me parece un tesoro interesante para descubrir. Casi no habla, se dedica a su trabajo, pero cuando lo hace, me parece muy agradable.

La persona que colabora con la limpieza de la oficina llegó a mi cubículo, así que salí para la cocina (donde está la otra chica, bonita y que me gusta su risa) a tomar dos vasos de agua. Saludé, contestó uno de los tres que estaba allí y ella también, segundos después. Me acerqué al dispensador de agua, la ví, noté que no era tan bonita después de todo.Aunque me sigue pareciendo "interesante". En verdad nunca hemos cruzado palabras, sólo miradas. No sé por qué. Supongo que entiende que soy muy serio. En realidad es así. Casi no hablo, a menos que tenga confianza o ame a alguien.

Me acabo de percatar en dos detalles. El primero que la chica de la risa bonita tiene una relación más directa con la de la oficina de al lado mío. Y el otro, más dramático a caso, que cuando pasa por mi cubículo, ya no me mira por encima de los vidrios.

Constantemente río solo, eso yo lo sé. Hablé con el gerente que pasa a ser uno de mis jefes inmediatos, verdaderamente es alguien agradable, puntual, responsable. Tendrá defectos, errores y horrores, como todos.Hoy el ambiente es algo así como que todos están corriendo, ayer varias personas se quedaron más de una hora en tiempo extraordinario. Hay exceso en el trabajo, lo cual por supuesto amerita mi reciente contratación.

Cada dos o tres horas se acerca la recepcionista connmigo, para que firme los informes que yo he revisado y autorizado. Es constamente sonriente, amable, tono de voz de recepcionista.

Las últimas dos veces que la chica bonita se ha acercado a la oficina vecina he tenido dos impulsos extraños en mí. El primero, llamarla y preguntarle su nombre (aunque ya lo sé) y el segundo, decirle, para ver cómo cambia de color que me gusta.
No sé qué pensar ahora. Estaba, verdaderamente, muy concentrado en un informe ya que tenía un grado de dificultad mayor al estándar. Cuando noté que a mi lado había una pequeña sombra, que dijo tímida "no te he preguntado cómo te ha ido", volteé a ver y era la chica. La ví bien, noté su atrevimiento, no sé por qué no lo hizo antes o por qué lo hizo ahora. Quizás sólo quiso ser amable, no lo sé. Me dijo que cualquier duda con las verificaciones, podía preguntarle a ella, o a sus compañeros. Repitió varias veces lo mismo, insistió en que cualquier duda podía consultarles.

Le agradecí, quería decir algo, pero no sé qué.

Noté que efectivamente no es tan bonita como pensé al principio, pero que es una chica agradable. Y sí es bonita, aunque no tanto.

Otra vez. Son ellas las que se acercan. Y no ha de ser un orgullo, pero suele pasar.

Quiero mencionar algo, sólo dos personas me han preguntado lo que preguntan siempre cuando uno es de reciente ingreso a una empresa. Fue la psicóloga y otra compañera que entró dos días antes que yo. La primera por razones obvias, supongo. Y la segunda para contarme que le está costando mucho y quería saber si a mí también.


Y además. La otra chica. Bonita. ¿Por qué se atrevió?

Mi ocasional amiga se fue a la recepción ya que la chica que normalmente sonríe allí, estaba en su hora de almuerzo. Yo acababa de terminar de comer y la ví, me acerqué, hice preguntas vanales a otra persona que estaba cerca, después (por primera vez con intención clara) me dirigí a ella, hice una broma, se río, me fui para no levantar sospechas.

Estuve pensando en regresar, aprovechar la hora de almuerzo de la chica de recepción, pero la verdad, no me atreví. Talvez mañana.

Día 2.

Salí a prisa de mi casa. Mi hermano estaba discutiendo porque no encontraba unos papeles que le servirían para salir temprano con su novia.Corrí, llegué a la estación de buses, noté que entre las personas que esperábamos abordar estaba ella. La saludé, subimos al bus, esperamos que arrancara para saber si aparecería mi hermano y no lo hizo. Así que me senté con ella. Platicamos cosas vanales, no había mucho tráfico, al final llegué casi una hora antes al trabajo.
Entré a la oficina, todo estaba oscuro, pero habían por lo menos tres personas, leí un poco del psicoanálisis de Freud.
Empezaron a llegar las personas.Hay una chica que es bonita, de baja estatura.
Ayer no vino y me pareció que tampoco el día de hoy, hasta que la ví. En realidad fue ella quien me vio por encima de los vidrios que encierran el cubículo donde me siento a redactar hojas de vida. Sonrió, yo hice un gesto disfrazado de sonrisa, estaba sorprendido.Hice un par de informes.
Cruzamos un otro par de veces por el camino sin decir nada y decirlo todo al mismo tiempo.
Fui a traer los datos a la otra oficina para iniciar otro reporte.
De pronto ella salió de la oficina donde trabaja. Y no sé por qué, suspiré.Finalmente llegó la hora de almuerzo, entré a la cocina, la cual está contigua al lugar de trabajo de la chica (a quien le dedicaré bastantes letras) en realidad esperaba alguna reacción de su parte, algo que me diera un inicio.
Sin ser fanfarrón estoy normalmente acostumbrado a que sean ellas quienes den la pauta. Ella no lo hizo entonces, quizás porque habían más personas, no lo sé.Salí, me lavé las manos, la boca y me preparé para la segunda jornada de labores. Ella salió de la oficina y otra vez (no sé si lo hace por costumbre) volteó a verme. Ella sale a almorzar después de mí, así que supongo que fue a eso.
Es bonita, nada más. Y se ríe bonito.
Tenía que actualizarme en cuanto a unos formatos especiales y específicos de una de las empresas. Entré a la oficina del gerente. Se sentía el olor a loción. En realidad es alguien muy amable, responsable, cuidadoso, exigente. Un buen jefe, es razonable.
Noté que la recepcionista había salido a su hora de almuerzo, regresé, y pensé en una mujer que amo. Quise decírselo, pero obviamente no es posible; ella lo sabe de sobra y eso me calma.
No sabía el nombre de la chica que trabaja cerca de la cocina haciendo consultas telefónicas. Se dirigía a su puesto de trabajo y el jefe la llamó. Ahora, quien era incógnita, bonita, ya tiene nombre.
Horas después escuché una sonrisa femenina, que captó mi atención, hice movimientos rápidos de cabeza para saber quién era. Otra vez, la chica, estaba en la oficina de la dueña de la empresa; supongo, porque nadie me la ha presentado, aunque a juzgar por su los detalles, es ella.
Después me encontré realizando la redacción del último informe de la tarde. Había una incoherencia por lo que me dirigí a la última oficina a hablar con uno de los verificadores de información. Allí estaba la chica, ocupando el teléfono. Además de todo lo que he dicho, me gusta su tono de voz.

Ella tenía una confusión del alma. Algo (o alguien) la tenía atada a sus recuerdos, a uno en especial.Lisiados del alma, paralíticos espirituales.

Él la amaba con toda su alma, como a su propia vida. Tenía sueños, potencial para lograrlos y quería conquistarla.

Ella quería ser conquistada, pero todavía no tenía certezas. Le parecía increíble, todo apuntaba - según ella - que era "él", pero algo, saber qué, no le alimentaba la seguridad requerida para afrontar el resto de su vida.

Él, a diferencia de la mayoría de hombres, entendía un poco al respecto. No era de los que se dejan guiar por la pasión y la locura, prefería la certeza, la convicción, la tensión y aseguraba que eso no le quitaba pasión a la relación, si no que aumenta el equilibrio y felicidad.

Ella tenía cierta madurez, pero poca experiencia. Él una combinación de ambas, aunque tampoco era alguien muy experimentado ni muy maduro.

Él admiraba la integridad de la chica.

Ella simplemente lo respetaba, lo admiraba, le gustaba ser guiada por él, por varias razones. Primero porque sabía de su capacidad y su profundo amor por ella, segundo porque cuando se descubría sujetándose a él, ya lo había hecho involuntariamente, por lo que suponía que lo amaba.

Ambos apostaban por esperar.

El tiempo diría el futuro.

Lo que ninguno de los dos sospechaba era la intervención de alguien más, alguien superior, distinto a ellos.
Desde hacía varios años él había decidido guiar su vida por el mundo espiritual, de lo que no se ve. Era abiertamente fanático y le gustaba que le llamaran así. Al fin y al cabo, daba todo por ese mundo paralelo, que según él le daba realidad y sentido al otro, al que es normal para los demás.Ella compartía eso, con pasiones especiales que coincidían en unión entre ellos.

Él, la fuerza sobrenatural, alguien divino, Dios, había planeado cada detalle para que se conocieran, para que se hicieran amigos y para, como decían los adolescentes, se hicieran más que amigos. Sólo debían prepararse, no dedicarse a "esperar", sino confiar en sus deseos.Es que si ella tenía la certeza, lo arruinaría todo. Daría por sentada la relación y estropearía el plan divino. Y además, él se involucraría con ella muy rápido, le gustaba acelerar los procesos.
Quizás nunca vivirían juntos. Aunque él le aterraba la idea, raramente. Siempre fue alguien solitario, que no dependía emocionalmente de alguien, pero esta era una excepción, de esas que hacen tomar decisiones atrevidas y que marcan el curso de una vida.Quizás vivirían juntos, y como todos los jóvenes, soñarían que su amor sería una historia qUe se repetiría a partir de ellos.
¿Y el tiempo?, era sólo alguien que jugaba con la paciencia.

Se estaban conociendo, y se estaban gustando y ese era el problema.

¿"Problema"?, en realidad bendición; es sólo que la conciencia mutua de "no estar preparados" les hacía negarse. Pero, en no mucho tiempo, consolidarían sus ideas románticas al respecto y darían juntos, los primeros pasos del resto de sus vidas.

viernes, 18 de abril de 2008

Conquistar

Todos los días, a cada momento tomamos decisiones. Si ir a algún lugar o no. Si hacer esto o aquello. Cada decisión afecta nuestro futuro inmediato o próximo, pero decididamente cambiará nuestro futuro.
La conciencia de las decisiones más importantes de nuestra vida, debe ser plena, entendida, elaborada.
Cuando alguien decide tomar rumbo junto a otra persona, es de esas decisiones que marcan, que trascienden porque afectarán a muchas personas más. Deberás pensar en un chico, en su familia, en que él será el papá de tus hijos, que será el tío de tus sobrinos, el cuñado, el yerno, será en resumen parte de tu familia; pero no sólo eso, tú serás parte de la suya.
Vas a tomar la mano de alguien, hombres. Vas a tomarte de la mano de alguien, mujeres.
Si él no sabe qué quiere, a dónde quiere ir, pon atención: no sabrá a dónde llevarte a tí.
Si ella no quiere caminar a dónde tú quieres ir, pon atención: será un obstáculo.
Ambos debemos entender que difícilmente cambiará la otra persona. Si hoy es como es: NO CAMBIARÁ, sencillamente porque la etapa de su formación ya terminó.
Dios no juega a los dados.
Personalmente me equivoco. Pero hablando y pensando en el vínculo de amor. Creo que es perfecto, exacto y además, aunque suene anticuado (ja!, como si me importara), creo que es para siempre.
Tiempo de tomar decisiones.
Tiempo de conquista.
De decidir.
Requiere una etapa espiritual. Tomar decisiones. Conquistar. Madurar.
El problema son los tiempos. Actos de servicio.

jueves, 17 de abril de 2008

Del diario de María, un día que tenía el período y no podía trabajar

Del diario de María, un día que tenía el período y no podía trabajar:
Si tuviese que contarle hoy mi vida a alguien, podría hacerlo de tal manera que me verían como a una mujer independiente, valiente y feliz.
Nada de eso. me está prohibido mencionar la única palabra que es mucho más importante que los once minutos: amor. Durante toda mi vida he entendido el amor como una especia de esclavitud consentida. Es mentira: la libertad sólo existe cuando él está presente. Aquel que se entrega totalmente, que se siente libre, ama al máximo. Y el que ama al máximo se siente libre. Por eso, a pesar de todo lo que pueda vivir, hacer, descubrir, nada tiene sentido. Espero que este tiempo pase de prisa, para poder volver a la búsqueda de mí misma, bajo la forma de un hombre que me entienda, que no me haga sufrir.
¿Pero qué tonterías estoy diciendo? En el amor, nadie puede machacar a nadie; cada uno de nosotros es responsable de lo que siente, y no podemos culpar a otro por eso.
Me sentí herida cuando perdía los hombres de los que me enamoré. Hoy, estoy convencida de que nadie pierde a nadie, porque nadie posee a nadie.
Ésa es la verdadera experiencia de la libertad: tener lo más importante del mundo sin poseerlo.
Extracto de Once Minutos, Paulo Coelho.

martes, 15 de abril de 2008

De la muerte

El desaparecimiento natural de alguien, es indudablemente un misterio.
En un momento está, en el otro ya no.
En un momento ríe y piensa, en el otro ya ni respira.
Lo único seguro que tenemos al nacer, es la muerte.
Es un misterio que quedará para la eternidad.
Cuando se nos quita a alguien que amamos, duele. Algunos se quedan con remordimientos, otros simplemente con el recuerdo ingrato que tanto daño hace. Quienes son menos mazoquistas, deciden simplemente ordenar sus recuerdos, administrar sentimientos y tratar de exonerarse. Lo logran por algún tiempo, pero pronto vuelve ese sentimiento extraño.
Y es que a veces parece que algo quedó inconcluso. Teníamos certeza de algo y ahora, ¡por Dios!, jamás, nunca volveremos a ver su rostro o a escuchar su voz.
Otra vez: NUNCA VOLVEREMOS A ESTAR CON ESA PERSONA.
Y lo más cruel: no hay a quien culpar. Dios no es culpable, la persona tampoco. Ja!, no hay mucho que hacer o decir. Cómo sacar del pensamiento a alguien.
Las lágrimas son buenas aliadas, de a poco van limpiando nuestra alma. Una tristeza profunda se hace parte nuestra. Amamos y atesoramos los recuerdos y las imágenes de su rostro. Uno que otro sueño raro donde puedes compartir nuevamente. Al cabo de algún tiempo decides que es momento de aprender a vivir sin él, sin ella. La conciencia de la vida, te hace olvidar la muerte.
En realidad deberíamos vivir todos los días, consciente de la muerte y dar siempre lo mejor de nosotros.
A veces pensamos que la muerte es injusta. A veces que ya era el tiempo correcto. Y de todas maneras es un gran misterio.
Te queda la angustia de dar un último adiós. El sentimiento extraño que ¡ya no está!, sientes soledad porque entre miles de millones de personas en el mundo, una, se fue.
Se quedan los proyectos, los amores, las felicidades y las tristezas.
Un respiro.
Analizamos qué hubiera pasado si tal o cual cosa hubiera sido diferente, soñamos con la idea de una pequeña posiblidad de vida. Pero volvemos a la realidad pensando y sabiendo que ya no está y no volverá. Está muerto, está muerta.
Una sonrisa valiente, retando a la lágrima razonable.
Te haces creer que todo pasa por algo y que hay que seguir viviendo.
En realidad, sabes que nada vale ya. Se murió.

lunes, 14 de abril de 2008

Historia de un amor (de casi todos los amores)

- Te admiro - dice - . Y admiro la lucha que estás librando contra tu corazón.
- ¿Qué lucha? -
- Nada - responde.
Pero sé a qué se refiere.
- No te hagas ilusiones - contesto - . Si quieres, podemos hablar de esto. Estás engañado con respecto a mis sentimientos.
Él deja de mover el vaso con agua mineral y me mira a la cara.
- No lo estoy. Sé que tú no me amas.
Eso me deja todavía más desorientada.
- Pero voy a luchar por eso - continúa - . Hay cosas en la vida por las que vale la pena luchar hasta el fin.
Sus palabras me dejan sin respuesta.
- Tú vales la pena - dice.
Yo aparto la mirada, y finjo estar interesada en la decoración del restaurante. Me estaba sintiendo sapo, y vuelvo a ser princesa.
"Quiero creer en sus palabras - pienso mientras miro un cuadro con pescadores y barcos - no va a cambiar nada, pero por lo menos no me sentiré tan débil, tan incapaz".
Disculpa mi agresividad - digo.
Él sonríe, llama al camarero y paga la cuenta.

Relatos

Hoy leí un libro. Generalmente un texto me atrapa de tal manera que no puedo pasar ni una semana sin terminarlo. Hoy leí uno completo.
En realidad no me gustó cómo terminó y tampoco me pareció a lo largo un libro espectacular, aunque reconozco que a momentos me atrapó y quería saber cómo continuaba, por eso lo leí.
El amor es una fuerza, un misterio, algo que está.
Lamentablemente para mi salud mental soy de las personas que no se pueden acoplar al sistema actual del mundo. Me cuesta mucho entender que tengo que vender ocho horas diarias de mi vida, levantarme de madrugada, regresar de noche, cansado, con ansias por cenar y dormir para empezar de nuevo, esperar fin de mes para cobrar, pagar facturas, continuar una carrera universitaria con la esperanza de un futuro mejor económicamente.
Me cuesta entender que a cambio de los años más productivos de mi vida, me darán algunos cientos de quetzales (moneda de mi país), y que en realidad no sabré con certeza de qué se trata el asunto para el cual trabajo. Que sentiré pasión por motivos externos, pero no sentiré la visión del iniciador del negocio.
En fin, no logro entender por qué es mejor eso que hacer siempre lo que quiero. Y la respuesta es básica, simple: se trata de dinero.
El dinero mueve al mundo.
Los tontos tienen al dinero en un alta estima. Los que son más tontos no trabajan para obtenerlo.
De todas maneras es complicado. Pero supongo que de esto se trata la vida. Encontrar estabilidad emocional, risas, vacaciones anuales, tristezas ocasionales para sentir que estamos vivos. Al caso amor.
Estoy siendo pesimista, mi vida es mucho más emocionante que eso. Son sólo rezagos del libro que leí hoy y no me gustó.

viernes, 11 de abril de 2008

Del placer de la amistad

Amigos hay pocos en la vida.
En mi caso, menos.
Especialmente porque he tenido la gracia de tener más amigas que amigos y eso hace que sea siempre una relación especial. La lógica y sana atracción entre personas de distintos sexos pues es agradable.
Verdaderamente es un placer tener amigos, es una gracia de Dios.
En todo tiempo ama el amigo.

jueves, 10 de abril de 2008

Las confusiones del alma y las revoluciones de sentimientos son indudablemente complicadas. No sabes qué sientes o tienes un dilema de dos amores. Es complicado tomar decisiones, aunque en el fondo sabes que te estás equivocando manteniendo esa inconsistencia.
A veces creemos que nuestros sentimientos, lo que nuestro corazón dice no conviene a los demás, y el amor nos hace retenernos. Es complicado amar y que eso mismo provoque no hacerlo.
A veces la conciencia que nuestro amor no bendice a otra persona afecta nuestro diario vivir.
Aseguras que amar a alguien más, no le bendice.
Refrenas todo, con tal de ver su felicidad.
En fin.
Ah..., bueno, amar la vida es lo más importante, entender que tenemos un plan y un propósito divino, que no tiene mucho que ver precisamente con lo que nosotros sentimos o dejamos de sentir.

martes, 8 de abril de 2008

Del amor terminado

Todos tenemos la manía de querer estar con alguien románticamente. No sé si es una mera costumbre o gana. Personalmente no lo tengo como hábito, soy digamos bastante "serio" en el asunto. Es normal para mí que esa "seriedad" sea poco constante. Es decir, quienes me tienen cerca saben que casi siempre estoy bromeando y eso provoca la dificultado para diferenciar entre mis bromas y mis realidades. Gran defecto, claro.
Y nada, pelear no es sano.
Amor y costumbre, se confunden.
Pero amar y acostumbrarnos, sí tiene diferencia. Aunque no la notemos.
Amar es sencillamente dar. Costumbre es constantemente sólo recibir.

domingo, 6 de abril de 2008

Ahhhh...de mi amor

El amor, dicen que es cosa de tontos.
Creen que amar es algo fácil, que es cosa de un beso.
Corazón..., te regalo una rosa.
¿Sabías que amo todo de tí?
Lo que veo, lo que ocultas.
Lo que muestras, lo que insinuas.
Lo que eres, lo que imagino.
Lo que me das, lo que no.
Tus preguntas, tus certezas.
Lo que dices, lo que callas.
Amo lo que dices, lo que piensas.
Te amo en tu cielo, y en tu infierno.
Ya dice la canción que contigo aprendí que existen nuevas y mejores emociones.
Que las hora tiene más de sesenta minutos.
Que la semana tiene más de siete días.
Buscamos los lugares solitarios. Sólo queremos vernos fijamente. Nada más queremos estar cerca, intimar conversaciones. Una luna de miel cada minuto.
El amor se nos va por el teléfono.
Sentimos amor profundo el uno por el otro, y creemos que eso es lo máximo.

Amarte a tí

Amarte a tí no es lo mejor, lo tengo claro
Habiendo tantas cosas por hacer menos traumáticas como hallarle figuras a las nubes, como ir al cine o no hacer nada.
Amarte a tí no es lo mejor, pero me gusta
Quizás estoy jugando como siempre al mazoquista
En vez de distraerme con el fútbol o con el internet como hacen todos
Amarte a tí no es lo mejor pero es perfecto, para encontrarle algún sentido a esta rutina de ser por siempre sólo un ciudadano
Amarte a tí me hace sufrir: qué buena suerte. Para acordarme de que existo y de que siento.
Para acordarme de tí todas las noches, para vivir.
Amarte a tí es un veneno que da vida, es una antorcha que se enciende si se apaga
Es lo sublime junto con lo idiota
Amarte a tí es la verdad más mentirosa
es lo mejor de lo peor que me ha pasado
es la ruleta rusa por un beso
es lo de siempre, improvisado
Amarte a tí es un error, dice un amigo, que cree que ser feliz es estar libre
y se pierde del matiz que da lo incierto
Amarte a tí...
es la embajada de un instante en mi cerebro
es también haberte odiado un par de veces
Amarte a tí..., es un absurdo y lo sabemos y así será, mientras nos dure...

Autor: Señor Ricardo Arjona.

De cuando todo acaba...

Las personas juegan para saber si la otra persona le ama. Pero puede llegar un día, cuando los proyectos ya no van con la misma persona, y la certeza del amor se perdió.
Es momento para detener la carrera.
Lo más importante es entender que el amor no se encuentra en otra persona.
Parafraseando una canción.
Que no se aparezca, para no saber que es la mujer que tanto, tanto amé. Ja!, pero ahora..., ya no está.
Los detalles que sembró en tu vida, te parecen que no eran tan bonitos. Las conversaciones, las risas, todo lo que fuimos, nada vale ya.
Lo importante es dejar de alargar la muerte...
Que ni siquiera diga mi nombre...
Los sueños que eran para tí, se perdieron.
Cuando sigues estando ausente, pero parece que estás.
Dejaste un abismo entre tú y yo, yo no te puedo olvidar y no sé si te pase lo mismo, pero me gusta pensarlo.
Cómo sacarme este amor, que ahora es dolor.
Me quedó una fotografía, donde estaba feliz, jaja, pero sobre todo y lo más doloroso: tú también.
Te extraño, te odio. Y te vuelvo a amar.
No sé cómo dejarte.
Amo la idea de tí.
Es delirante buscarte entre la gente, olvidar que no estás.
No se acaba el amor, sólo con decir adiós. Hay que tener presente que el estar ausente no borra el recuerdo, ni compra el olvido.
El que tú no estés, no te aparta de mí. Entre menos te tengo, más te recuerdo.
Se fueron los sueños, se agotaron las excusas para hablarte, simplemente no estás, y lo peor es que ya no quiero regresar.

Otra canción...

Mira si estoy loco por tu amor, que en lugar de huir de tí, te pido ayuda
mira si me has hecho enloquecer, que en lugar de aborrecerte, te deseo
Vamos a decirnos la verdad, tú te aprovechas de mí y yo te amo
Vamos a decirlo de una vez: cómo puedes tú ser libre mientras yo soy preso, de la cárcel de tus besos...
Mira si estoy tonto de verdad, que pienso que si obras mal, es culpa mía
Mira si me has hecho no ser yo, que en lugar de hacerte daño: te protejo
Vamos a decirnos la verdad: si te pudiera borrar, te borraría
Vamos a decirlo de una vez: tú me tratas como quieres, porque yo soy preso, de la cárcel de tus besos...
Preso, abrazando tus cadenas, condenado a lo que quieras y hasta que quieras, amor...

jueves, 3 de abril de 2008


A veces no dejas que tus amigos ayuden. Cierras tu corazón, todas tus puertas. Y todo se complica más de lo que debido.

La vida no es justa, pero ese no es el problema, sino el verdadero problema es cómo vamos a responder ante esas injusticias.

Los desórdenes emocionales, están a flor de piel, la holgazanería.

Los secretos del alma, las arenas en el alma son un problema verdadero. Esos estorbos del pasado que afectan el presente y atentan contra el futuro.

miércoles, 2 de abril de 2008

De la tensión, la sabiduría, la pasión y la locura

La tensión es como una cuerda floja. Hay que guardar el equilibrio entre ella y la pasión combinada con locura. Tensión y sabiduría versus pasión y locura.
La tensión es muy importante para el amor. Es no comer ansias. Es esperar. La sabiduría es elegir, dirección inteligencia.
La pasión implica darle poco a poco paso y permiso al romance. La locura es tomar riesgos, apostar por tus sentimientos, creerles.
No hay algo más engañoso que el corazón. Pero debes amar con todo tu corazón, toda tu alma, todas tus fuerzas, todo tu espíritu, todo tu cuerpo.